Coral López Pérez y Carmen Valls Ballesteros nos comparten en su libro COACHING EDUCATIVO que nuestro objetivo como educadores debiera ser formar a las nuevas generaciones en competencias emocionales que las capaciten para saber gestionar la incertidumbre y desarrollar la suficiente flexibilidad para ser capaces de adaptarse a las situaciones de cambio. El reto es formar alumnos, que además de excelentes conocimientos tengan buenas habilidades emocionales y de trabajo en equipo, que sepan comunicarse y que desarrollen un pensamiento crítico y creativo. Para ellos como educadores deberemos hacer sitio a los procesos emocionales y ofrecer una formación integral que preste atención a la dimensión cognitiva, como así también a lo relacional y emocional desarrollando las diversas inteligencias del ser humano.
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